"Oh, lengua, eres la elegida para disfrutar del sabor dulce; hablas con la verdad, que simboliza el sacrificio. Te respetas a ti misma y respetas a los demás. Te ocupas de tu trabajo, sin abandonar tu hogar, sin tener amistad ni fricción con tus vecinos. ¡Cuán dulces son las palabras que pronuncias! Oh, noble, recitas encantadores poemas y cantas hermosas canciones. Cuando se te da algún sabroso platillo o fruta, no los retienes, sino que inmediatamente los envías por la garganta hacia el estómago. Cuando se te da algo amargo lo escupes, protegiendo al estómago del sufrimiento. Eres desinteresada, obtienes mucha alegría del compartir, y eres el paradigma de la tolerancia.Vives en medio de treinta y dos agudos dientes, pero con inteligencia y tacto te conduces sin sufrir un solo corte. ¡Por favor, nunca cometas el error de proferir palabras inadecuadas!" De esta manera, recuérdenle a la lengua sus nobles cualidades, y enséñenle para que nunca pierda su reputación por criticar a los demás.- My Dear Students, Vol 5, Ch 2, Mar 9, 1993. |