EL MANTRA GAYATRI
Extractado de una vieja publicación de LUMEN DE LUMINE
El Mantra GAYATRI como todos los demás mantras de los Vedas y otras escrituras no fueron creados para ser discutidos o servir de tema de conversación en reuniones o tertulias, por el contrario tiene un destino trascendente.
Discurrir sobre de los pasajes de las Escritura es un ejercicio legítimo. Pero sólo cuando se lo hace como complemento de las demás gimnasias y prácticas espirituales que constituyen el KARMAKHANDA (la sección operativa) védico.
No existe nada que repugne más a la espiritualidad que la práctica de la religiosidad sin su contenido consciente y el manoseo dialéctico de las cosas sagradas.
Por lo tanto vamos a circunscribir los puntos principales a los que nos vamos a referir:
Señalar que el conocimiento del Arte Místico requiere la práctica de los correspondientes actos y gimnasias (que son lo único apto para hacer despertar la “Virtud” o Poder en el practicante), y que la pretensión de alcanzarlo por la sola vía intelectual, es totalmente errónea.
Mostrar la existencia de una mecánica del pensamiento que se aparta de las normas ordinarias, y que se acerca a las formas iniciaticas de la meditación.
Ayudar a comprender el significado y sentido de este famoso Mantra.
El desarrollo del tema está basado en la extraordinaria obra de Sir John Woodroffe, VARNAMALA .
MANTRA es un verso del veda. GAYATRI es una de las formas del verso sánscrito; y el Mantra que nos ocupa se llama así porque está escrito en dicho métrica (la métrica llamada Gayatri, consiste de 24 sílabas divididas en tres octasílabos, los cuales, a su vez, están divididos en dos partes, llamadas “ apertura” y “cadencia” cada una de cuatro sílabas.
El Gayatri-tantra, una Escritura, define: “Aquello por cuya meditación, el Espíritu “encarnado se libra del error y logra la Felicidad y la Liberación; Aquello con cuya ayuda se “alcanza el cuádruplo fruto del Chaturvarga, recibe el nombre de Mantra”. Otra Escritura dice: “Mantra se llama así porque es logrado por un proceso mental “.
La silaba MAN de la voz Mantra, procede de la palabra MANANA, que significa “pensar” y TRA, viene de TRANA, que quiere decir “salvar”, sacar afuera.
Mantra es aquella locución meditando en la cual, el hombre se libera de las limitaciones propias de la existencia sensorial. No se trata, entonces de un silogismo ordinario, sino de una gimnasia mental de “meditación”, “concentración”, “contemplación”, etc. Que tiene un propósito trascendente:
El órgano del principio pensante (MANAS), es la palabra. MANTRA es aquella forma de la palabra que sirve de herramienta para “llamar” (AMANTRANA) y “hacer salir afuera”. En el caso del GAYATRI, lo que se “contempla” es el Espíritu Solar que todo lo genera, sostiene, y absorbe; y lo que se hace “salir afuera”, lo que se hace aparecer mediante esta “contemplación” son “los cuatro objetivos de la Existencia” que constituyen el llamado “cuádruple sendero” (Chaturvarga) y que son: La Religión o Bien, la Riqueza o Prosperidad, la Felicidad, Y la Liberación. (Respectivamente; Dharma, Artha; Kama; y Moksha).
Puesto que se manifiesta en forma de palabra, la sustancia o materia del Mantra (y la fuerza que, en su actividad, pone de manifiesto) son las letras. Por eso dice un aforismo iniciatico al referirse al alfabeto, que. “En Ello está la Fuerza”.
Todos los sonidos orales básicos o letras, son Mantra en el sentido de que evocan o provocan los poderes naturales elementales y de ahí que el lenguaje común, que en general agrupa estos poderes de una manera arbitraria y caótica (desde el punto de vista natural), sea fuente de confusión y de mal; de ahí que todos los instructores, desde Buda a Pitágoras y Jesús, instruyesen a sus discípulos respecto a la necesidad de poner freno a la lengua- esa espada de doble filo que, cuando es utilizada por quien “ no sabe hablar” se convierte en origen de la desdicha.
Por eso cualquier palabra o sílaba, no cualquier combinación de sonidos es Mantra, en el sentido de “la palabra liberadora”. Para que lo sea, sus elementos (las letras), deben estar colocados en debido orden (Krama y constituir el “nombre natural “del Poder o entidad que se evoca o provoca.
Es verdad, entonces que las letras y sus combinaciones son todas formas del Verbo. Pero mientras Las palabras del lenguaje común buscan y encuentran su significado dentro de los límites de la mente humana vulgar, al tiempo que su disonante sonido produce la confusión en el plano del poder natural.... las voces mántricas propiamente dichas, por estar construidas según las leyes de la armonía natural, encuentran sus objetos entre las entidades arquetípicas de lo que podríamos llamar “La Mente Universal”.
Se hace claro entonces que no se puede hablar de “traducir un Mantra “. La “traducción “solo cabe en el orden del entendimiento individual; solo puede servir para dar el sentido intelectual de un Mantra. Cada individuo posee su juego de conceptos y su juego de palabras para llamarlos. Dos individuos de distintas lenguas, para un mismo juego de conceptos tienen un mismo juego de palabras. Entonces, para que haya entendimiento entre ellos se requiere un “traductor” a fin de traduzca las respectivas frases al lenguaje del otro interlocutor. Pero el Mantra es otra cosa. Es una “lengua de la naturaleza “, que no actúa limitada al interior de las mentes individuales, sino que, por así decirlo va a buscar su significado en la “Mente universal” la cual posee su propio juego de sonidos para servir de cuerpo a su propio juego de esencias.
Entonces El Mantra es una masa de brillante radiante energía, mediante la cual evoca las esencias naturales y provoca el poder-extraordinario que “duerme” en los cuerpos.
b) Uno supremo e inefable que constituye la Divinidad” o esencia abstracta que corresponde al Mantra como un sujeto a su nombre, y que tiene su contraparte o “imagen” en la mente del Iniciado-Operador. Y ahí la necesidad practica de que este posea el significado intelectual del Mantra.
c) Uno sutil y vital -que bajo la forma de su peculiar Poder, se pone de manifiesto en el cuerpo del operador cuando es “llamada” por el Mantra.
Y es por la unión (a-una-miento, acordamiento) de estos aspectos: el abstracto, el activo, la imagen mental, el activo, la imagen mental; y el cuerpo sonoro, que el operador de esta ciencia realiza su obra.
De ahí que las Escrituras que tratan el tema digan que la emisión de un Mantra vació de su contenido mental y abstracto, “es puro movimiento de labios”
De ahí que tampoco sea suficiente con el conocimiento intelectual del significado de un Mantra, para que su Poder despierte: El conocimiento intelectual evoca los conceptos mentales individuales que residen en la mente del operador; pero por si solo no puede evocar y provocar la presencia de las esencias abstractas y su contraparte activa en el cuerpo del operador.
El contenido mántrico es algo más que conocimiento intelectual, algo más que sonido vocal. Es una Esencia Real, más una imagen interna, más un Poder Viviente. Cuando estas tres están acordemente presentes, se dice que el Mantra “despierta”.
Las Escrituras describen minuciosamente los procedimientos por los que es posible “despertar” el Poder de cada Mantra. No es suficiente con “pronunciarlos” debidamente; no alcanza con entenderlos y pronunciarlos correctamente: es también preciso poder y saber “despertarlos”.
Porque aunque la substancia del Mantra es su sonido; y aunque ese “sonido “posee (como Palabra que es) un significado intelectual; y a pesar de que ese sonido-palabra unido a la idea es el microcuerpo o la microforma del Mantra en la mente del operador.... no despierta como Poder en su cuerpo a menos que se establezca un rapport (un acorde) entre su esencia Real y su presencia activa en el cuerpo del operador:
Pasemos ahora a considerar el Gayatri Mantra, el más sagrado de los Mantras Vedicos, del que se dice que contiene el Veda como una semilla:
Su texto sánscrito dice así:
OM, Bhur, bhuvah, Svah, Tat savitur varenyam bhargo devasya dhimahi; dhi yo yo nah prachodayat. OM!
Estas palabras significan: “OH la triple Forma de Aquello en las esferas de la Tierra, el Aire y el Firmamento! Contemplemos ese adorable espíritu solar que siempre esta yendo y viniendo, y que hace surgir todas las cosas en sus colores. Y que esta meditación nos conduzca”.
A esta interpretación se llega por el análisis del los componentes del Mantra:
OM es AUM -la “palabra Sagrada “- formada por los sonidos A-U-M- que corresponden a los aspectos Creador, Conservador, y Destructor de Aquello”.
Las voces BHUR, BHUVAH, y SVAH, se llaman “las tres exclamaciones” (vyakritis) con las que, según la tradición exotérica Brama hizo aparecer las esferas mundanas e infernales. VYA significa “separar” “apartar”; y HRID se refiere al corazón. Del corazón del Gran Espacio que es la Suprema Conciencia, en forma de “exclamaciones” o “palabras” (esto es: como expresiones particulares de la Conciencia Cósmica) —emanaron las “ esferas “ de la Tierra, el Aire y el Firmamento.
Un comentarista explica las palabras que siguen a las “tres Exclamaciones” de la siguiente manera:
“TAT significa Aquello; SAVITUR es el posesivo de Savriti; VARENYAM quiere decir Adorable; BHARGO es el Espiritu Solar”.
Savriti es uno de los títulos que se otorgan al Sol (Surya). Deriva de la raíz SU, que quiere decir “hacer surgir”. Por lo tanto, el Sol, como Causa de cuanto existe, es Surya. Y puesto que “hace aparecer “ todas las cosas, recibe el nombre de Savriti. Dice un Purana: “Surya” es la divinidad visible; es el ojo y el hacedor universo; no hay otra divinidad eterna como El. “ Este universo ha emanado y volverá a ser absorbido en El. Los Planetas, las estrellas. Vasu “Rudra, Vayu: Agni, y los demás, son parte de El”.
Por lo tanto Surya, el Sol, que es Savriti, es DYAOS, el Ojo del Día; el Solus del firmamento, la luz y el Calor de la vida, y psicopompo de la conciencia.
Por BHARGO debe entenderse la Divinidad que reside en la “región solar”. Es el Espíritu viviente del Sol, el cual también habita en nosotros. Es la luz y la vida de todo cuanto alienta.
La misma idea se encuentra en los primeros versículos del Evangelio de Juan, si los leemos teniendo presente su significado esotérico. Porque ESO que es un halito solar, es el mismo Maravilloso Poder que como fuego sin humo, sostiene la vida y conciencia de todas las criaturas. En otras palabras: ESO que el yoghi encuentra en la región de su propio corazón, es el mismo Espíritu que mora en el firmamento como Dyaus o Solus.
La voz BHARGO debe entenderse como derivada de la raíz BRIJ, que significa “ brillar “, “madurar”, “ revelar “, y..... “ destruir . En esta acepción, es Aquello que hace madurar y transforma, Quien “ brilla “ y pone de manifiesto todo mediante su Luz; y es El Mismo quien, en disolución final poniendo en juego su consumidor aspecto ígneo; destruye todas las cosas:
BHARGO , también puede ser considerado como un derivado de BHA (que significa “ dividir las cosas según sus clases “, y RA (quiere decir “ color” porque produce el color de todo) y GA (porque así siempre esta yendo y viniendo. Como dice un Brahmana: “ Braga es el espiritu de todo cuanto existe, movil o inmóvil, en los Tres mundos. No hay nada fuera de El “.
DEVASYA es el genitivo de Deva. Y Deva (“el brillante”) es aquel radiante y retozón Surya, que esta constantemente jugando a la Creación, Conservación, y Destrucción de los mundos.
DHIMAHI, puede traducirse como “ contemplemos”, “meditemos” y la frase DHI YO YO NAH PRACHODAYAT, significa “ que esta meditación nos conduzca “ dándose por sobre entendido que es a lo largo del Chaturvarga, el cuadruple sendero de los “ cuatro objetivos de la existencia”, o sea: la Religión o Bien, la Riqueza o prosperidad, la Felicidad, y la Liberación: Y en verdad de verdad, el Braga, el espíritu solar que habita en nosotros, esta constantemente dirigiendo nuestras facultades por ese camino:
Devociones tales como esta “contemplación”, se practican en los momentos en que el astro-Rey cambia de actividad, o sea en los interludios del alba, el mediodía, y el atardecer. Es entonces que las tres clases de los “nacidos dos veces “toman refugio (mediante el Mantra) en “ese adorable espíritu solar que siempre esta yendo y viniendo”, y que, desde el fondo mismo de la Substancia, se levanta en la naturaleza para organizarla en formas de vida, la sensibilidad del ánimo, y la luz del entendimiento.
Este BHARGO está en nosotros, y ES nosotros mismos. Ese Calor que nos sacó de la Piedra y nos hizo humanos, y que ahora se expresa en nosotros como Pensamiento- Palabra... ese BHARGO es el mismo Poder que nos sacara de lo somos hoy para llevarnos a otra forma de experiencia y conciencia por que Su Sabiduría es infinita; Su Poder es Omnipotente, Su Belleza resplandeciente, y Su Ley es eterna. Porque “El es todo Esto, y no tiene segundo”.