Gracias Señor por todo cuanto me diste en el año que termina, Gracias por los días de sol y los nublados tristes, por las tardes tranquilas y las noches oscuras. Gracias por la salud y por la enfermedad, por las penas y las alegrías. Gracias por todo lo que me prestaste y luego me pediste. Gracias Señor, por la sonrisa amable y por la mano amiga, por el amor y por todo lo hermoso y por todo lo dulce, por las flores y las estrellas, por la existencia de los niños y de las almas buenas.
Gracias por la soledad, por el trabajo, por las inquietudes, por las dificultades y las lágrimas. Por todo lo que me acercó a Ti. Gracias por haberme conservado la vida, y por haberme dado techo, abrigo y sustento Gracias Señor. Gracias Señor.
¿Qué me traerá el año que empieza? Lo que Tú quieras Señor, pero te pido fe para mirarte en todo, esperanza para no desfallecer, y caridad para amarte cada día más, y para hacerte amar entre los que me rodean.
Dame paciencia y humildad, desprendimiento y generosidad, dame Señor, lo que Tú sabes que me conviene y yo no sé pedir. Que tenga el corazón alerta, el oído atento, las manos y la mente activas, y que me halle siempre dispuesto a hacer tu Santa Voluntad.
Derrama Señor, tus gracias sobre todos los que amo y concede tu paz al mundo entero. Así sea. Gracias Señor. Gracias Señor. Amén.
Oración de Año Nuevo
Señor Dios, dueño del tiempo y de la eternidad. Tuyo es el hoy y el mañana, el pasado y el futuro. Al empezar un año más, detengo mi vida ante el nuevo calendario, aun sin estrenar, y te presento estos días que solo Tú sabes si llegare a vivirlos.
Hoy te pido para mi y los míos la paz y la alegría, la fuerza y la prudencia, la claridad y la sabiduría. Quiero vivir cada día con optimismo y bondad, llevando a todas partes un corazón lleno de compresión y paz.
Cierra mis oídos a toda falsedad; mis labios o palabras mentirosas, egoístas, mordaces o hirientes. Abre, en cambio, mi ser a todo lo que es bueno. Que mi espíritu se llene sólo de bendiciones y las derrame a mi paso.
Cólmame de bondad y de alegría para que cuantos conviven conmigo o se acerquen a mi, encuentren en mi vida un poquito de Ti. Dame un año feliz, y enséñame a repartir felicidad. Amén.
24 de Diciembre de 1980
EL SIGNIFICADO del avatar es éste: Para salvar a la humanidad, Dios, por su amor, afecto y compasión, desciende hasta el nivel del hombre y despierta la conciencia divina en el hombre mismo. Dios lo hace consciente de Dios en él mismo, cuando lo encuentra desesperado buscando fuera de sí mismo a Dios, que es su verdadera esencia. Como recompensa por el mérito adquirido en muchas vidas anteriores, se les ha concedido esta oportunidad de prepararse para alcanzar la meta más alta de fundirse con el Absoluto. Un pájaro necesita dos alas para volar, una carreta necesita dos ruedas para poder moverse. Para viajar hacia la meta, el hombre también necesita estudio y constancia, conocimiento y ascetismo. El Gita declara que entre todos los estudios, el estudio del Alma es el más santo. Se conoce como Atmavidya o Brahmavidya. Vidya, el conocimiento, muestra el camino; tapas, el ascetismo, los hace alcanzar la meta. Son los dos ojos que colaboran para un propósito.
Un labrador tiene que concentrar sus esfuerzos durante las estaciones propicias, cuando tiene que arar y sembrar. No puede permitirse el lujo de hacer cálculos sobre el costo y los problemas. Llueva o truene, noche y día tiene que hacer la tarea para poder recoger la cosecha. Así también, para ustedes, estudiantes, éste es el período de la vida cuando tienen que estar activos y alertas. Su futuro está conformado por lo que hagan ahora. Ésta es la verdadera etapa fundamental de su vida, cuando deben preparar sus mentes para enfrentar los retos y su inteligencia para resolver los misterios.
Dios es poder eterno, omnipotente, omnisciente. Él es la causa y la consecuencia, el alfarero, el barro y la vasija. Sin Dios no puede haber Universo. Él tuvo la voluntad y el Universo apareció. Es su juego, la manifestación de su poder. El hombre encarna su voluntad, su poder, su sabiduría, pero no está consciente de esa gloria. Una nube de ignorancia vela la verdad. Dios envía sabios, santos y profetas para develar la verdad y Él mismo aparece como avatar para despertarlo y liberarlo. Hace dos mil años, cuando un orgullo estrecho y una gran ignorancia corrompían a la humanidad, Jesús vino como la encarnación del amor y la compasión, y vivió entre los hombres mostrando los altos ideales de la vida. Deben poner atención a la lección que él transmitió en las diferentes etapas de su vida. "Yo soy el mensajero de Dios", declaró primero. ¡Sí! Cada individuo tiene que aceptar ese papel y vivir como ejemplo de amor y caridad divinos. El gurú debe actuar como el despertador; él debe hacer levantar al dormido para que cumpla su deber consigo mismo; "¡Utthishta! ¡Jagratha!", como proclama la Upanishad. "¡Levántate, despierta!", y da testimonio de Dios dentro de ti, en cada pensamiento, palabra y acto.
Este día se celebra la Navidad. Traigan a su memoria las palabras que expresó Jesús, el consejo que dio, las advertencias que dio, y decidan conducir su vida diaria a través del sendero que él marcó. Sus palabras deben quedar impresas en sus corazones y ustedes deben decidir practicar todo lo que él enseñó.
Hay dos puntos de vista que luchan para ser aceptados por ustedes: lo espiritual y lo mundano, lo "basado en la realidad" y lo "basado en la apariencia". Después que termine este discurso, cuando se marchen de este internado hacia Prashanti N¡layam, imaginen a una serpiente que aparece en el camino. En realidad es sólo un pedazo de soga, pero semeja una serpiente y ustedes tienen un sentimiento de terror. Su terror no cambia la cuerda en serpiente. Cuando encienden una luz descubren que su sentimiento era errado y que la soga fue siempre una soga. El Universo está envuelto en la Divinidad.
Jesús sabía que Dios ordena todo. Así, aun en la cruz, cuando sufría la agonía, no abrigó ningún mal deseo contra nadie y exhortó a los que estaban con él a tratar a todos como instrumentos de la voluntad de Dios. "Todos son uno; sean iguales con todos." Practiquen esta actitud en su vida diaria. Por cierto que es difícil desarrollar una fe sin vacilaciones en esta gran verdad. La mente, como se quejó Arjuna, oscila entre creencia y duda, va de una afirmación a su negación, y esto causa desorden y confusión; pero hay un método con el cual puede ser conquistada. El abejorro puede hacer un hueco en el árbol más duro; sin embargo, cuando llega el crepúsculo y está sorbiendo el néctar de la flor de loto, como resultado los pétalos se cierran sobre el abejorro y éste se encuentra aprisionado sin ninguna esperanza de escapar. ¡No sabe cómo enfrentar la suavidad! Así también, la mente puede poner en juego sus trucos y saltar desenfrenadamente en cualquier terreno; cuando se le coloca a los pies del Señor, se vuelve inactiva e inofensiva. Para ofrecer en su totalidad la mente al Señor, es necesario un profundo desapego de los deseos mundanos. La devoción superficial o la constancia sin profundidad no pueden tener éxito. Para hacer caer el duro árbol de sándalo, se necesita un hacha pesada y fuerte. Ése es el privilegio de esta etapa de sus vidas: cultivar este desapego, someter los caprichos de la mente y manifestar la Divinidad que está latente en ustedes. La Divinidad, cuando se expresa en la acción, florece en servicio amoroso a sus semejantes. Vuelve el corazón puro, libre de orgullo y codicia.
Jesús vagó con un propósito determinado por sitios solitarios por doce largos años, entregado a estudios, ejercicios espirituales y meditación en Dios. Por supuesto, uno debe proteger y preservar el cuerpo, que es un regalo divino, un bote equipado con instrumentos con el cual el hombre puede cruzar el mar del cambio perpetuo y alcanzar la Divinidad. Esta meta de la vida tiene que ser alcanzada antes que el cuerpo bote comience a hacer agua y se desintegre a causa de la enfermedad, la pereza y la senilidad. La salud física, mental y espiritual tiene que ser fomentada con especial cuidado. Sin embargo, uno tiene que estar listo para desechar el cuerpo en defensa del dharma (el bien) o de Dios. Tengan a Jesús como un ideal para esto. Él exhortó a todos a observar las enseñanzas de las antiguas Escrituras y a obtener paz y alegría de ello.
Los judíos observaban los rituales y regulaciones dadas por los profetas en los textos bíblicos considerándolos válidos para todos los tiempos, y por eso juzgaron como erróneas las enseñanzas de Jesús. No estaban movidos por el odio personal hacia él. Este problema surge en todas las épocas: el conflicto entre la letra y el espíritu, las doctrinas que son tenidas como santas, las diferentes prohibiciones y observancias que tienen que ser escrupulosamente seguidas, por un lado, y la verdad subyacente por otro. En la fe védica uno también puede encontrar este conflicto entre los que sostienen la antigua tradición y los promotores de una comprensión más profunda.
El mejor modo de resolver la confusión y los conflictos que impiden el progreso moral, ético, material, tecnológico y espiritual, es que el hombre viva tan completamente como un hombre debe vivir y que se eleve a la altura de lo Divino que es su realidad. Ésta es la eterna y universal enseñanza. Los pensamientos que el intelecto estructura deben ser reflejados como sentimientos en la mente y ser convertidos en acciones por las manos. El pensamiento, la palabra y la acción deben estar coordinados, uno debe seguir al otro. El signo de una persona santa es: "Un pensamiento, una palabra, un acto".
La Navidad es la misa que se dice en el cumpleaños de Cristo. Es fundamentalmente un rito religioso, sagrado. Tratarlo como un festival para beber y bailar o solamente recordara Jesús es muy errado. Este día debe pasarse en oración; y no solamente este día, sino que la disciplina de la oración debe ser una forma de vida. Las oraciones con fines mundanos no llegan hasta Dios; llegarán solamente a las deidades que tratan con esos asuntos mundanos restringidos. Pero todas las plegarias surgidas de un amor puro, de un anhelo desinteresado de ofrecer servicio y de corazones que abarcan a todos, llegarán hasta Dios, porque Dios es la verdadera encarnación del amor. Sabemos que podemos ver la luna sólo por medio de su luz. Así también, Dios, quien es amor, sólo puede ser visto a través del amor. Dios es amor: vivan en amor. Ése es el mensaje que les doy.
Prashanti Nilayam
24 XII 80
Ustedes se llaman "vidyarti", el que busca vidya. Pero es un infortunio que muchos estudiantes no busquen vidya (iluminación subjetiva), sino vishaya (placer objetivo). Ambos, maestro y alumno, se han alejado del ideal. El discípulo debería ser el actor y el profesor, el director; el discípulo debería ser como Arjuna, el que sostiene el arco; el maestro debería ser como Krishna, el Yogeshvar; el alumno debería ser purusha (hombre, persona) y el gurú, el Purushotama (la Persona Suprema). Ésta es la razón por la que el gurú es exaltado como Brahma, Vishnú y Maheswara y como Parabrahman mismo. Solamente Dios es el gurú; los otros pueden, a lo sumo, ser maestros, instructores. El gurú, por su infinita compasión y sabiduría, aconseja el sendero más beneficioso. El discípulo, por su infinita devoción, sigue y alcanza la meta. Arjuna dijo, después de escuchar los consejos del Señor: "Actuaré de acuerdo con tu palabra". Ustedes tienen que ser discípulos como él. Entonces podrán vivir en paz y alegría en este conflictivo mundo de miseria, y demostrar en sus vidas la excelencia de su tradición y cultura.El que Cristo anunció
24 de Diciembre de 1972
Bangalore
LAS RELIGIONES SURGEN de las mentes de hombres buenos, los cuales buscan hacer buenos a todos los hombres y luchan por eliminar el mal y corregir a los malos. Los hombres buenos son numerosos, puesto que deben enmendar a los individuos, sus actividades, profesiones y actividades que desempeñan, caracteres y peculiaridades. El individuo tiene que observar, antes que nada, los límites y leyes establecidos y de ello derivar alegría y fortaleza. S51o así, su mente limpia se encaminará hacia niveles cada vez más elevados; él y la sociedad de la cual forma parte, se beneficiarán por ello.
Por lo tanto, es apropiado celebrar el natalicio de Jesús, quien sintió la necesidad de salvar a la humanidad y luchó por lograrlo, pero la celebración debe consistir en adherirse a sus enseñanzas, ser leal a los principios, practicar las disciplinas y experimentar la conciencia de la Divinidad que él buscó despertar.
Actualmente, el mundo se satisface con sólo palabras, además de ser testigo de astutos ardides planeados para ocultar los errores de la gente. Los natalicios de los grandes personajes se celebran con hipocresía y pompa externa, sin existir interés alguno por examinar el mensaje que legaron ni esfuerzo para practicarlo y obtener la bienaventuranza que promete.
Los grandes maestros pertenecen a la humanidad; es un error creer que Jesús pertenece sólo a los cristianos y que la Navidad es un festival sagrado sólo para Occidente. Aceptar a uno de ellos como propio y desechar al resto por pertenecer a otros, es una muestra de mezquindad. Cristo, Rama, Krishna, son para todos los hombres de cualquier lugar. Las extremidades y los órganos, juntos forman un cuerpo; diversos estados y comunidades forman el mundo. El sustento otorgado por la gracia divina circula en cada parte del cuerpo, ayudándolo a funcionar en armonía. El sustento de amor, otorgado por la gracia divina, tiene que circular en cada estado y comunidad para hacer que el mundo viva en paz y alegría. Si esta verdad se realiza, no surgirá ninguna idea de diferencia.
Si los miembros de una familia están en disputa, las tierras y otras posesiones se descuidarán o se perderán. La separación de un miembro de la familia también será una gran pérdida, porque la gracia que la sostiene disminuirá y se perderá. Cuando una mano es amputada, el miembro pierde su función, y se desperdicia durante la amputación una gran cantidad de sangre. De igual manera, la gracia divina de amor se pierde cuando un país se aísla, volviéndose un débil e ineficiente miembro de la comunidad mundial.
División, diferencia y distinción separan al hombre de la gracia otorgadora de vida, que alimenta a cada célula del cuerpo y a cada individuo en el mundo. El mundo está sustentado por esta misma gracia. Un árbol requiere para su crecimiento tierra, sol y atmósfera, pero, más que estos tres, requiere la semilla. La vida del hombre está condicionada por sentimientos y acciones, así como por las consecuencias de los mismos, pero su existencia depende de la voluntad de Dios. Los árboles que crecen son diferentes debido a la naturaleza del suelo, la cantidad de sol y la calidad de la tierra. De igual manera, los hombres pueden variar conforme a las consecuencias de los diversos tipos de sentimientos y acciones que emanan de ellos. Pero, al igual que es cierto afirmar que las semillas son las mismas, es verdad decir que la voluntad de Dios que creó al hombre es la misma, es una, sin diferencias. La variedad de formas, emociones y actitudes, así como la de comunidades y lealtades, es el resultado de que el hombre ignore su unidad fundamental en la voluntad divina y actúe en contradicción a esa unidad.
Las aguas que fluyen en un río tienen a la luna en sus profundidades, así también las de un lago; el cielo tiene a la luna. La luna que vemos en el río parece que está fragmentada y fluye rápido, aparentemente, con la corriente. La luna que observamos en el lago es serena, imperturbable. Estas dos imágenes sólo son reflejos de la verdadera luna en el cielo. La luna reflejada en la corriente es el alma individualizada, envuelta en la actividad, enredada en maya, causa y efecto. La luna reflejada en la plácida faz del lago es el yogui, el santo, que ha alcanzado equilibrio y paz, morando en el Uno. La verdadera luna en el cielo es el Testigo eterno, el Principio absoluto y primigenio. Cristo habló de ellos cuando hizo tres aseveraciones sucesivas. Refiriéndose a la activa alma individual, la luna que se mueve y agita, Él dijo: "Yo soy el mensajero de Dios". Refiriéndose a sí mismo como yogui, quien se ha elevado por sobre las dualidades y alcanzado equilibrio, Él dijo: "Yo soy el hijo de Dios". Al conocer que estos dos no son sino reflejos, y que la verdadera luna es el Testigo en el cielo, que Él también es el Absoluto sin forma y sin nombre, Él declaró, hacia el final de su vida: "Yo y mi padre somos uno".
Todos los seres son imágenes del Alma Universal, bajo los nombres y formas que aparentemente han asumido. Ésta es la verdad, contenida, expuesta y demostrada en los textos espirituales de la India, y que forman la base de la cultura bharatiya. La esencia de todas las religiones y credos es ésta: la fusión en esta unidad; la meta de toda búsqueda espiritual es conocer esta unidad. Mas esta verdad patente es ignorada, y los hombres originan luchas, ansiedad e intranquilidad entre ellos mismos y perpetran horrores para justificar la separación tan querida para sus fragmentadas mentes. El paso del tiempo ha ensombrecido el esplendor del mensaje; la fascinación ejercida por lo material y lo mundano los ha alejado del camino, y el desarrollo de la ciencia y tecnología ha originado que vivan en el error y la ilusión. Así, la gente apetece ahora lo prohibido y promueve precisamente lo que la religión condena. Todas las religiones enseñan que debemos reverenciar a los padres y mostrarles gratitud; pero contrariarlos y olvidarse de ellos es lo que actualmente está de moda. Las religiones establecen que los ancianos deben ser venerados, dado que son los depositarios de la experiencia y su guía es indispensable; pero ahora, los mayores y los ancianos son tratados con desprecio como si fueran estorbos. Las religiones insisten en la verdad, pero ahora, el hombre que se apega a la verdad es ridiculizado como si fuera un tonto. La crueldad y violencia, condenadas por todas las religiones, se esgrimen como armas del progreso y medios para alcanzar cualquier fin. Sin embargo, las verdades básicas de la religión no son afectadas o manchadas por el mal que los hombres practican o las luchas despiadadas en que se recrean. Sólo aquellos que no están dedicados a practicar el mensaje de la religión malgastarán sus energías en condenar a otras religiones y glorificar la suya. Y, una vez que practiquen sinceramente, desaparecerá la necesidad de encontrar faltas en los demás o hacer públicas las virtudes propias. Tales personas celebrarán el nacimiento de los fundadores con. espíritu de dedicación, profundizando la fe en sus corazones y reverenciando sus doctrinas sólo a través de una práctica más intensa en vez de enfáticas argumentaciones.
Si anhelamos alcanzar la meta, debemos seguir el camino que conduce a ella. Cuando anhelen alcanzar a Dios, tienen que observar los lineamientos que Él ha establecido. ¡No necesitan tener constantemente presente su nombre o su fisonomía! Eso puede no llevarlos lejos. Caminen por el sendero; cada paso los acercará. Cuando quieren llegar a una población, se tienen que levantar y avanzar hacia ella; ¡ésta no se levantará y avanzará hacia ustedes! Cuando necesiten alcanzar a Dios, levántense y muévanse, como Él les ha indicado que lo hagan. Sólo de esta manera pueden lograr que la vida valga la pena.
Jesús enseñó sencillas y prácticas lecciones sobre elevación espiritual para el bien de la humanidad; Él manifestó poderes divinos para infundir fe en la validez de sus enseñanzas y señaló el camino que puede conferir a los hombres el dulce néctar de la bienaventuranza. Además, exhortó a la gente, por medio de¡ precepto y el ejemplo, a cultivar las virtudes de caridad, compasión, paciencia, amor y fe. Éstas no son cualidades separadas y diferentes, sólo son las diversas facetas de la Divinidad en el hombre, que éste tiene que reconocer y desarrollar.
La gente habla del sacrificio de Cristo según se evidencia por su crucifixión. Sin embargo, estaba apresado y atado y fue coronado con espinas por la turba que lo capturó; poco después, fue clavado en la cruz por sus captores. Una persona atada y golpeada por sus enemigos no puede decirse que haya sacrificado algo, porque no es libre. Pongamos atención al sacrificio que Jesús hizo por su propia voluntad mientras estaba libre. Él sacrificó felicidad, prosperidad, bienestar, seguridad y posición, enfrentó la hostilidad de los poderosos, rehusó ceder o transigir y renunció al ego, lo cual es muy difícil de lograr. Venérenlo por esto. Él sacrificó voluntariamente los deseos mediante los cuales el cuerpo atormenta al hombre; éste es un sacrificio mayor que el sacrificio de¡ cuerpo ante el sometimiento. La Navidad debe ser celebrada sacrificando por lo menos uno o dos deseos y sometiendo al menos los más nocivos impulsos de¡ ego.
Los seguidores de Jesús se han dividido y sufrido cismas en diversas ocasiones, pero la vida de Cristo es una lección de unidad. Cuando Cristo estaba en la cruz, lo invadieron ciertos resentimientos hacia los hombres que lo torturaban. De pronto escuchó una voz alertándole: "¡Toda vida es una, mi querido hijo! ¡Sé igual con todos!" A esto siguió otra exhortación: "La muerte es el ropaje de la vida". Al igual que uno se quita la ropa usada y se viste otra, así el alma se quita y se pone cuerpos. De ese modo, Jesús fue advertido en contra de¡ odio y malos sentimientos, así como de lamentaciones a las que el hombre está propenso.
Las existencias de las grandes personalidades son vividas con el fin de establecer el bienestar de la humanidad, la prosperidad y paz de¡ mundo y la liberación individual de la esclavitud por los deseos y pasiones sensuales. Esto se comprueba en los extraños fenómenos que ocurren al momento de su advenimiento. Se cree que cuando Cristo nació, hubo tales manifestaciones. El rey había ordenado un censo y cada uno tenía que registrarse en su propio pueblo. María y su esposo iban por el camino que llevaba a su pueblo natal. María estaba encinta y los dolores empezaron a mitad de¡ camino y como no conocían a nadie en la aldea por donde pasaban, se refugiaron en un establo. José la acomodó en el espacio que había entre dos vacas y salió a medianoche en busca de alguna mujer que pudiera ayudarlo. Pero de pronto, oyó el grito de¡ niño.
Y, la historia dice, había una estrella en el cielo que cayó con una nueva luz, y esto guió a algunos tibetanos y a otros al lugar donde nació el Salvador. Esta historia es leída y tomada como cierta por muchos: aunque las estrellas no caen ni siquiera se deslizan tan súbitamente. Lo que la historia significa es esto. Había una enorme aura de esplendor que iluminaba el cielo por encima de la aldea donde nació Cristo. Eso significa que había nacido aquel que iba a vencerla oscuridad del mal y la ignorancia, el que iba a difundir la Luz del Amor en el corazón del hombre y en los dirigentes de !a humanidad. La aparición del resplandor y de otros signos para anunciar la era que se ha iniciado son naturales cuando se presentan las encarnaciones en la Tierra. Jesús habría de hacer añicos la oscuridad que había envuelto al mundo y el aura de luz era una señal que anunciaba el acontecimiento. Los Maestros llegan en respuesta ala plegaria del hombre, Thamaso maa jyothir gamaya (¡Guíanos de la oscuridad hacia la Luz!).
Si cada uno cumple con su deber con un espíritu de dedicación, la Luz puede iluminar todo, pero si las puertas del corazón se oponen a la Luz, ¿cómo podrá desaparecer la oscuridad? No pueden sentarse y esperar que la encarnación derrame paz y alegría sobre ustedes. La Encarnación viene para advertir, guiar y despertar, para establecer el camino e iluminarlo de amor. Pero el hombre debe escuchar, aprender y obedecer con fe y esperanza. Hay una historia que cuenta que una vez la riqueza y la sabiduría discutieron acaloradamente acerca de su propia importancia. La primera argüía que sin ella el cuerpo era débil, el cerebro confuso, y la sabiduría una quimera. La sabiduría contestó que sin ella, el hombre no puede ni siquiera distinguir la riqueza de la pobreza o cómo ganarla o usarla. El alma intervino y les dijo que ambas eran igualmente importantes, pero sólo cuando se usan adecuadamente. La riqueza sin sabiduría se vuelve un instrumento para la explotación y la tiranía: por el contrario, la sabiduría sin riqueza se vuelve mera fantasía y un proyecto sin realizar. Su uso las hace valiosas; su mal uso las hace desastrosas. Es como el cuchillo, en manos de un maníaco se convierte en instrumento para asesinar; en las manos de un cirujano, ¡se convierte en un instrumento que salva vidas! ¿Están haciendo el bien con la riqueza que poseen? ¿Están beneficiando a otros por medio de su sabiduría? Ésa es la prueba.
Este día de Navidad, cuando celebramos el nacimiento de Cristo, decidan llevar una vida de servicio amoroso al débil, al desvalido, al angustiado, al desconsolado. Cultiven tolerancia y paciencia, caridad y magnanimidad. Atesoren los ideales que él estableció y practíquenlos en su vida cotidiana. La forma en que actualmente se celebra la Navidad muestra cuánto se han alejado los hombres de esos ideales, ¡cuánta ignominia están acumulando en su nombre! Se reverencia la hora de medianoche; se adora con luces; se pone el árbol de Navidad y después se pasa la noche bailando y tomando. Es un día de felicidad sagrada; ¡pero la felicidad queda reducida a la excitación intoxicante de la embriaguez! La bebida es un hábito tan pernicioso que cuando el hombre toca la botella, queda preso en ella, ¡y no puede escapar! Primero, el hombre bebe vino; después, el vino bebe más vino; y, finalmente ¡el vino se bebe al hombre mismo, que se queda hundido y ahogado en la bebida!
¡El licor destruye la humanidad en el hombre! ¿Cómo puede el licor desarrollar la divinidad en él? Deben danzar con alegría divina, en vez de ello ¡se entregan al baile sensual como un sustituto pernicioso! Hagan puros sus corazones, santas sus actividades y benéficos sus sentimientos hacia todos. Ésa es la mejor manera de celebrar el nacimiento de Cristo.
Hay un punto que hoy no puedo dejar de presentar a su atención. En el momento en que Jesús se estaba fundiendo con el Principio Supremo de la Divinidad, comunicó algunas nuevas a sus seguidores. Esto ha sido interpretado de diferentes maneras por los comentaristas y por aquellos que disfrutan acumulando escritos sobre escritos y significados sobre significados, hasta que todo está inflado y hay una enorme confusión. La declaración misma ha sido manipulada y enredada hasta formar un acertijo, a pesar de ser tan sencilla: "Aquel que me envió entre ustedes volverá", y apuntó a un cordero. El cordero es simplemente un símbolo, un signo del amor, y representa a la voz Ba Ba. Era el anuncio del advenimiento de Baba. "Su nombre será Verdad", declaró Cristo. Sathya significa verdad. "Él llevará una túnica roja, roja color sangre. (Baba señaló entonces la túnica que llevaba.) Él será de baja estatura, con una corona (de pelo)". Cristo no declaró que Él mismo volvería, sino que dijo: "Aquel que me envió volverá". Y Sai, el pequeño Baba con la corona de pelo ensortijado y la túnica roja, ha vuelto. No sólo en su forma física, sino que Él está en cada uno de ustedes, como el morador en su corazón. Está allí con el traje del color de la sangre que lo llena.
Los grandes axiomas de la cultura bharatiya encontrados en los Vedas Dios es el motivador interno de todos los seres, Todo esto está envuelto en Dios, Todo esto es Vasudeva, la divinidaddeben ser interpretados de esta manera. Ése es el misterio interno de la encarnación. ¡Dios encarnado en todos! Todos son Uno y el Uno es todo.
Hay un solo Dios, Él es Omnipresente; hay una sola religión, la religión del amor; hay una sola casta, la casta de la humanidad; hay un solo idioma, el idioma del corazón.
Bangalore
24 XII 72
DÍA DE AÑO NUEVO *************************************************** "La felicidad lleva consigo el dolor, nadie puede separarlos. Es el dolor el que lleva a la felicidad. En verdad, tanto el dolor como la felicidad son producto de la Edad de Kali" (Verso en Telugú) ¡Encarnaciones del Amor! Han pasado muchas edades, pero el hombre no ha desarrollado sentimientos nobles. Un verdadero ser humano es aquel que tiene una mente buena. Las cualidades de una mente buena son: tener el brillo del sol y la frescura de la luna; lo hace a uno pronunciar palabras sagradas y confiere paz en la sociedad. Sólo aquel que tiene compasión, amor, paciencia, tolerancia y sacrificio es un verdadero ser humano, pero esas cualidades sagradas se han vuelto escasas en el hombre moderno. ¿Cómo puede ser llamado ser humano aquel que carece de cualidades humanas? La Bienaventuranza se origina en sentimientos sagrados El hombre ha tenido su origen de la Naturaleza. La tierra sostiene la vida, el sol da luz, los árboles dan oxígeno, el agua apaga nuestra sed y el aire nos ayuda a vivir. ¿Cómo es posible que el hombre, nacido de los cinco elementos y sostenido por ellos, no posea las sagradas cualidades de los cinco elementos? Habiendo nacido y siendo alimentado y cuidado por la naturaleza, el hombre debe practicar y propagar los ideales establecidos por la Naturaleza. Los pájaros, los animales y los árboles obedecen a la naturaleza y llevan vidas ideales. Los árboles inhalan el venenoso dióxido de carbono y exhalan el oxígeno que sostiene la vida. Hasta los animales cumplen con sus deberes y ayudan al hombre de muchas maneras. Pero, a pesar de que ha nacido como un ser humano, ¿por qué es que el hombre no practica los valores humanos? No está en posición de propagar los valores humanos en la Sociedad, puesto que él mismo ha dejado de practicarlos. ¡Encarnaciones del Amor! Todos los hombres esperan que el año nuevo les vaya a conferir paz, felicidad y prosperidad. El Año Nuevo no es que traiga consigo la felicidad o la aflicción. Ayer es lo mismo que hoy y hoy es lo mismo que mañana. Los días son iguales, pero uno experimenta placer o dolor dependiendo de las propias acciones de uno. Las acciones meritorias no conferirán miseria y las acciones pecaminosas no pueden dar felicidad. Uno tendrá que enfrentar las consecuencias de sus propias acciones, pero aquel que se hace receptor de la Gracia de Dios, será capaz de tratar, ecuánimemente, a la felicidad y al dolor, la Gracia de Dios destruye montañas de pecados y confiere paz... Pero debido al impacto de la Era de Kali, el hombre ha perdido la fe en Dios, va detrás del dinero y del poder. ¿Cómo puede un hombre tal alcanzar la Divinidad? El hombre se eleva del nivel humano al Divino sólo si practica valores humanos. De modo que el hombre debe cultivar los valores humanos. Los años vienen y se van, así también la felicidad y el dolor. Nada confiere beatitud permanente salvo la experiencia del Atma. El hombre no puede lograr la paz y la felicidad de sus acciones a menos que tenga sentimientos sagrados en su interior. Muchas personas esperan que el Año Nuevo los confiera felicidad y prosperidad, pero, de hecho, el Año Nuevo sólo confiere los resultados de sus acciones pasadas. A fin de expiar sus pecados pasados, deben cultivar las cualidades sagradas y dedicarse cada vez más a actividades sagradas en este año nuevo. De hecho, la bienaventuranza está dentro de ustedes, se origina en sus sentimientos sagrados. Así, que deben manifestar la bienaventuranza desde adentro, no puede serles otorgada por otros. Nadie puede quitarles esa bienaventuranza ni pueden ustedes obtenerla de afuera. El Año Nuevo trae los resultados de sus acciones pasadas El corazón es el centro de los sentimientos sagrados, está lleno de compasión. Es la compasión la que da lugar a los sentimientos sagrados. Deben desarrollar la compasión, expandir la luz del amor y cultivar sentimientos divinos... Si no lo hacen, ¿cómo pueden esperar que el tiempo les confiera la felicidad? Se cosecha lo que se siembra. Si se esperan buenos resultados, se deben cultivar buenos sentimientos. Con pureza de corazón, firmeza de mente y acciones desinteresadas, se puede llegar a ser el receptor de la Gracia Divina, que removerá cualquier cantidad de sufrimiento de un solo golpe. No se puede lograr nada sin la Gracia Divina, de tal modo que deben emprender las actividades que les conferirán la Gracia Divina. La paz y la felicidad no pueden obtenerse del mundo externo, sólo a través de la Gracia Divina se pueden tener paz y felicidad. La gente celebra el advenimiento del año nuevo con cantos y bailes. Ese entusiasmo y felicidad son momentáneos. Lo que el hombre necesita es paz y felicidad permanentes. ¿Cómo puede esperar lograr la felicidad permanente si se dedica a acciones mundanas? Debe emprender actividades sagradas a fin de obtener felicidad permanente. Sólo de las dificultades se deriva la felicidad. Es imposible experimentar placer sin dolor, el placer es un intervalo entre dos dolores. Se puede ser un hombre opulento o un aspirante espiritual; recibirá lo que merece. No puede esperar cosechar mangos si siembra una semilla de neem y viceversa. Tal como es la semilla, así es el fruto. Similarmente, tal como es el pensamiento, así es el resultado. El dolor y el placer provienen de los propios pensamientos de uno. La gente se engaña pensando que reciben dolor y placer del mundo externo. En realidad, provienen de sus propios pensamientos. Deben, por lo tanto, originar un cambio en sus pensamientos ¡Encarnaciones del Amor! Han pasado los años pero los sentimientos del hombre no se han vuelto puros, sólo logrará la paz cuando transforme sus sentimientos. Debe llenar a plenitud su corazón con sentimientos puros. En todas las circunstancias, hagan que sus sentimientos sean puros e ideales, que todas sus acciones sean para el bienestar de otros. Los Vedas declaran : "Paropakarah Punyaya Papaya Parapidanam" o sea "Se logra mérito sirviendo a otros y se comete pecado al hacerles daño". Cuando sus sentimientos sean sagrados, el hombre obtendrá resultados sagrados sin pedirlos. Debido al impacto de la Era de Kali, los pensamientos, palabras y acciones del hombre no están en armonía los unos con los otros. Pueden decir o hacer cualquier cosa, pero el resultado que obtengan dependerá de sus pensamientos, de modo que, hagan que sus pensamientos sean sagrados y vuélvanse buenos seres humanos. Sólo aquel que tiene buenos pensamientos y una mente buena puede llamarse un buen ser humano. A veces los actos hechos con una mente buena pueden dar resultados malos. El resultado puede parecer adverso, pero hay bondad latente en él. Una mente buena nunca cambiará debido a tal resultado. El hombre es esencialmente bueno, de modo que debe llevar una vida de bondad. Pero hoy en día el hombre vacila constantemente y esto se debe a su falta de voluntad. El hombre debe tener una mente inconmovible y una visión firme, para no estar sujeto a dificultad alguna. Sólo la Gracia de Dios puede ayudar al hombre a superar estas tendencias negativas. Se puede ser millonario, pero la riqueza no lo redimirá si sus sentimientos son impuros. Aun si un hombre no posee nada, puede lograr lo más alto si tiene un corazón puro. Cualquier cosa que un hombre puro vea o toque se volverá oro. Por otro lado, si carece de pureza y no hace el esfuerzo en la dirección correcta, hasta una rama en la mano se volverá una serpiente. Los pensamientos forman la base del mundo entero (Samkalpa Mulam Idam Jagat). Algunas personas sienten que sus expectativas no fructifican a pesar de sus mejores esfuerzos. Eso se debe principalmente a la ausencia de pureza en sus sentimientos e intenciones. Este día marca el comienzo del nuevo año 2001. El año próximo se volverá 2002. El destino no cambia con el cambio de año. Junto con el cambio de año, sus acciones también deben cambiar para lo mejor, sólo entonces obtendrán buenos resultados. ¡Estudiantes! Les irá bien en el examen sólo si estudian intensamente durante todo el año, tal como es la acción, así es el resultado. A veces, pueden cuestionar el resultado adverso de una buena acción, pero, de hecho, las buenas acciones nunca darán malos resultados. Algunas veces aparentan ser adversos, pero esencialmente son buenos Es una debilidad humana ver sólo el aspecto negativo ignorando el aspecto positivo. "El placer y el dolor, lo malo y lo bueno coexisten, nadie puede separarlos. No pueden encontrar placer o dolor, lo bueno o lo malo excluyendo al otro. El placer resulta cuando las dificultades fructifican." (Verso en Telugú). Hasta un mango dulce puede saber agrio cuando se cosecha prematuramente. Debe dejarse madurar, sólo entonces tendrá sabor dulce. Así, también, no se desanimen si sus acciones no dan los resultados deseados de inmediato. A su debido tiempo sus esfuerzos tendrán que fructificar. Deben esperar por el tiempo apropiado manteniéndose puros y sagrados. Entonces estarán seguros de cosechar lo que merecen. Sigan el Sendero Interno ¡Encarnaciones del Amor! Han estado esperando el comienzo del año nuevo con grandes expectativas. Sus esfuerzos deben ir de acuerdo con sus expectativas. Antes de emprender cualquier actividad, deben discriminar e indagar en los pros y los contras. Hoy en día el hombre ha perdido el sentido de discriminación, no sabe cómo respetar a los mayores ni comportarse con los demás. Debe hacer uso de su sentido de discriminación e indagar en tales asuntos. Debe hacer uso adecuado de su mente (mati), del destino (gati), de la posición (sthiti), y de la riqueza (sampatti), que Dios le ha otorgado. Por el contrario se ha vuelto víctima de los seis rasgos malvados en el hombre, a saber: el deseo, la ira, la codicia, la lujuria, el orgullo y la envidia. Estos rasgos malvados no han sido creados por Dios sino que surgen del alimento y hábitos equivocados. El alimento y los hábitos son responsables de las cualidades en el hombre, buenas o malas. La mente, el destino, la posición y la riqueza son de origen divino. Las cualidades sagradas se originan en el corazón y corresponden al sendero interno (nivritti), mientras que todas las tendencias mundanas como acumular bienes, aceptar trabajos, jugar juegos, desear posiciones de autoridad, etc., corresponden al sendero externo (pravritti). Las tendencias mundanas se originan en la cabeza y pueden cambiar. Sólo las tendencias internas que se originan en el corazón son verdaderas y eternas. El hombre, ignorando las tendencias internas, toma el camino hacia lo externo. En consecuencia, es incapaz de lograr la felicidad permanente. Transita por el sendero externo (pravritti) pero espera los resultados que corresponden al interno (nivritti). Cada acción del hombre moderno está orientada al sendero externo. Habla la falsedad, ve lo malo, escucha mentiras y actúa de modo incorrecto. De hecho, su vida entera está ahora orientada por el sendero externo. Debe abandonar este sendero y dirigir su visión hacia adentro. Antes de que considere cualquier pensamiento, debe discernir si es bueno o malo. Nunca se podrá lograr felicidad permanente si se sigue el sendero externo. Por ejemplo, pueden tener 20, 40, 50 u 80 años. Han estado comiendo sus alimentos cada día durante todos estos años. Pero, ¿puede su hambre quedar satisfecha permanentemente? No. Sólo el gusto varía pero el hambre es la misma para cada cual. "El alimento puede variar pero el hambre es Una. Las joyas son muchas pero el oro es Uno. El color de las vacas puede variar pero la leche es Una. Los seres son muchos pero el aliento es Uno. Las formas son muchas pero Dios es Uno. (Verso en Telugú). El hombre lleva una vida de engaño porque ve diversidad en la unidad. Debe confrontar muchas adversidades durante el curso de su vida. Pero la vida es transitoria. Si se ha de llevar una vida tan efímera ¿por qué tomar el camino equivocado y engañarse? Mientras uno viva debe andar por el camino de la verdad y establecer un ideal para otros. Sólo entonces puede ser santificada la vida. Sólo las actividades apegadas a la verdad pueden conferir paz eterna. Un poeta puede componer muchos versos en alabanza a Dios y orar por Su protección. El sentimiento es importante y no la forma en que los versos se componen. Uno puede alabar a Dios de acuerdo con la propia capacidad pero debe hacerlo con sentimientos puros, firmes y sagrados. Puede que se la pase cantando bhajans, ofreciendo adoración y emprendiendo actividades de servicio por un número de años, pero todo esto resultará inútil si no hay transformación del corazón. El corazón debe llenarse de compasión. Sólo entonces puede ser llamado un templo de Dios. De otra forma, se vuelve la verdadera cueva de un demonio. No permitan que pensamientos malvados entren a su corazón. El año nuevo no trae nada nuevo consigo. El día en que nazcan pensamientos frescos y sagrados en su corazón, ese será un verdadero día de año nuevo. Puesto que todos ustedes consideran este día como un día de año nuevo y lo acogen con entusiasmo, Yo los bendigo a todos para que cultiven pensamientos frescos, sagrados e ideales. Deseo que compartan con otros todo lo que ustedes consideren como bueno. Deseo que lleven una vida apacible y bienaventurada y actúen como modelo para el resto del país. A veces, pueden surgir cualidades malvadas como deseo, ira y odio dentro de ustedes, pero no deben permitir que entren a la mente. Una vez que se les prohíbe la entrada, automáticamente se retirarán. Si se les permite entrar a la mente, se van a quedar allí. He aquí un pequeño ejemplo: Si alguien viene a su puerta con su equipaje, si lo reciben y empiezan a intercambiar palabras agradables, inmediatamente entrará y se instalará en su casa. Por otro lado, si lo ignoran por completo, irá a un hotel o a una posada. De la misma forma, cuando las cualidades malvadas tratan de entrar a su mente, simplemente ignórenlas. Entonces regresarán a su lugar de origen. Por el otro lado, si las entretienen, van a gobernarlos. Entonces, cuando se cruzan con algo malvado, no lo miren, ni hablen de ello, ni lo escuchen. Simplemente ignórenlo. Esta es la verdadera cualidad humana. Sólo les permitirán entrar a su casa a sus amigos y parientes. ¿Le permitiría alguien a los asnos y cerdos que entren a su casa simplemente porque hay puertas? Su cuerpo tiene nueve puertas. Deben permitir la entrada solamente a cosas sagradas. No dejen que entre la maldad, sólo entonces podrán obtener la paz eterna. La vida humana es altamente noble, valiosa y sagrada. No la malgasten dándoles lugar a las cualidades malvadas, usen su poder de discernimiento y hagan uso apropiado de sus sentidos. Sólo entonces será su vida redimida, lograrán la inmortalidad y una infinita bienaventuranza. Emprendan una vida nueva y divina en este año nuevo. Abandonen todos los viejos sentimientos no sagrados. Cultiven sentimientos divinos. Una vez que tengan sentimientos divinos, ningún otro sentimiento podrá entrar en su mente. Instalen a Dios dentro de ustedes, entonces le seguirá automáticamente la paz. ¡Encarnaciones del Amor! Les bendigo para que puedan llevar sus vidas en paz, prosperidad y felicidad y así concluyo mi discurso. (Bhagavan concluyó Su discurso con los Bhajans "Hari Bhajana Bina" y "Hare Rama, Hare Rama") Traduccion Equipo de Trad. OSSS de Latinoamérica |