HUMANIDAD
El Sentido De Ser Humano
Importancia De Los Valores Humanos
Las Cuatro Metas De La Vida
"En este mundo del hombre, las cinco cualidades de Sathya (Verdad),
Dharma (Rectitud), Ahimsa (No-Violencia), Prema (Amor) y
Shanti (Paz), son, en verdad, como los cinco "pranas", la quintaescencia,
las fuerzas dadoras de vida. Y entre las cinco, el
Amor es la más noble y la que hay que buscar con ahínco. Promuevan, nutran
y sustenten el Amor en sus corazones".
¡Encarnaciones del Alma Divina!: Esta vida como ser humano es en realidad difícil de alcanzar. Entre todas las formas vivientes, al visualizar aquello que denominamos hombre, desean no tanto ver los medios de sustento del cuerpo como tal, sino también su manifestación en actos que hagan que el intelecto florezca. No obstante, por así decirlo, el hombre es un ser débil. No sólo por el hecho de que su vida ha de terminar algún día, sino porque esta vida que conlleva con límite superior y que lo convierte, fundamentalmente, en un testigo de todo, no llega a ser consciente de que en el hombre, y únicamente en él, existe este Poder del Atman, este Atma-Shakti. Se le ha otorgado el poder del intelecto y, aunque su vida haya de tener un fin tarde o temprano, debería, no obstante, velar por que este intelecto desempeñe el papel que ha de jugar.(1)
El requisito principal en la vida de un hombre, es el de ser humano. El hombre, sea cual fuere su posición o autoridad, no debe ignorar los Valores Humanos.
La ciencia y la tecnología han desvalorizado hasta tal punto la humanidad, que la actual generación de jóvenes, hombres y mujeres, es incapaz de reconocer su verdadera naturaleza divina.
El egocentrismo se ha convertido en la meta de la vida de la generación actual de jóvenes.
Los valores espirituales como el desinterés, la divinidad y la dignidad humana se han visto socavados por el progreso material. El torbellino del rápido progreso de la ciencia y la tecnología ha hecho que se produzcan cambios indeseables en nuestra sociedad. Se han visto desarraigados los valores éticos y morales tan esenciales para el bienestar humano. En la sociedad exhiben su danza diabólica las cualidades demoníacas como la ostentación, el egoísmo y la palabrería vacua.
Las gentes hacen caso omiso de la Verdad y la Rectitud. Piensan que la mayor meta de la vida es el progreso material gracias al propio esfuerzo. Al renunciar a la Verdad, y a la Rectitud, las gentes educadas le causan daño a la sociedad en nombre de protegerla.(2)
Una naturaleza humana representa aquello dentro de lo cual buscan fortalecer el Carácter. Es por ello que las fuerzas esenciales y vitales en el hombre son: Sathya, Dharma, Prema, Shanti y Ahimsa. En estos cinco principios uno puede realizarse haciendo que florezcan con ellos la naturaleza y la realización propias y el conocimiento de uno mismo.
Este rasgo es importante para el hombre y la clave para él es su propia naturaleza humana; sus principios guías son su patriotismo y su santidad, para lo cual la clave la constituye el principio de unidad.
Estos cinco componentes conforman, entonces, nuestra existencia orientada hacia Dios, nuestro carácter propio, nuestro patriotismo, etc.
La individualidad propia de uno connota el sentimiento de pertenecer al país. Sólo cuando permiten que esta individualidad salga a la luz podrá existir algo como la nacionalidad. O, más bien, podría decirse que aparece algo como la Divinidad, y sólo cuando han realizado lo Divino, surge un sentido de plenitud, de liberación.(3)
Tenemos por otra parte los Purushartas; en la forma de Dharma, Artha, Kama y Moksha. Los cuatro Purushartas son las cuatro metas de la vida. El Dharma es la conducta correcta; Artha es la riqueza; Kama es el deseo y Moksha es la liberación.
¿Por qué razón ganaron renombre y fama nuestros antecesores como defensores de la moralidad en la sociedad? Ello se debió a la práctica ejemplar que mantenían de los rituales en su vida diaria. Se atenían a los cuatro Purushartas y compartían con los demás los beneficios que de ellos derivan.
Las gentes de hoy centran sus anhelos en Artha (Riqueza) y Kama (Deseo), olvidándose de cultivar y perseguir el Dharma ó Conducta Recta y Moksha ó Liberación. Esto ha causado desorden y falta de seguridad, tanto en la sociedad como en la nación en general. El descuido de la Verdad y la Rectitud constituye la causa principal de la falta de paz y de seguridad que se ve hoy en el país.
Las gentes deberían buscar el Artha para practicar el Dharma. Su Kama debiera ser el Moksha.(4)
¿Careciendo de raíces, cómo podrían llegar a pensar en las ramas? Y alguien que trate de buscar la forma de vivir sobre estas ramas de Artha y Kama, tarde o temprano habrá de caer. Es así que el que tiene como soporte las ramas de Artha Y Kama, estaría convirtiendo su vida en un ejercicio de futilidad. En tanto que los verdaderos Purushartas, representan a los que han reconocido estos ideales del Dharma y Moksha y que viven sus vidas de acuerdo a ellos.
Se debe a la influencia de este Kali Yuga, que el hombre pierda de vista la importancia de las palabras pronunciadas; ello lo hace buscar varias interpretaciones y éstas se vuelven contradicciones. Muchas veces, va más allá del sentido de las palabras. Aquí va un pequeño ejemplo. Tendemos a regocijarnos ante el hecho de que el sol ha salido, y la razón para ello es que podemos retomar nuestras actividades diarias, porque creemos que sin cumplir con nuestro deber no hay felicidad. No obstante, todas estas actividades y acciones nuestras van en pro de la felicidad material. Así también, cuando el sol se pone, nos disponemos a procurarle descanso al cuerpo que ha pasado por variadas vicisitudes durante el día. Ante estos fenómenos de la salida y la puesta del sol, tendemos a entender que cuando sale, lo ha hecho para que el cuerpo pueda llevar a cabo las tareas que necesita y que, cuando se pone, lo hace para que podamos darle reposo al cuerpo. Mas ésta no es la razón y no es el sentido de este fenómeno. Alguien que lo haya entendido realmente no experimentará nunca ni felicidad ni alegría, porque cada amanecer y cada atardecer marcan otro día en la vida del hombre y acortan el lapso de ésta.
De modo que la salida y la puesta del sol, en realidad, no han ido sino allanando días de nuestra existencia. En otras palabras, día a día se van aproximando a su propio fin. Este es el significado profundo al que le damos tantas interpretaciones y que provoca alegría y felicidad. Nada en este mundo se le ha dado al hombre para sí mismo.
Veamos un ejemplo. Un individuo tiene un trabajo que realizar en la ciudad y se va a pasar diez días a ella. En la ciudad se aloja en un hotel y todos los días al terminar con sus labores, regresa a él. Sólo por el hecho de estar pasando unos días allí, éste se ha transformado en "su hogar". De manera similar, el hombre tiende a sentir que su madre, su padre, sus bienes y todo lo que le ha sido legado, son algo suyo. Mas tienen que entender que todas estas cosas están allí para que puedan descansar momentáneamente en ellas, ¡pero no son suyas!.
La razón es clara, todas estas cosas no han venido con ustedes. Estas cosas no vienen con el hombre, porque no son de su propiedad. En estos asuntos, pueden llegar a entender realmente el significado de la existencia cuando profundizan en su sentido interno y tratan de comprender de qué se trata realmente.
Es así que, aunque el lapso de vida del hombre es más bien limitado, el poder del intelecto es grandioso, de modo que, a través de este poder, traten de santificar aquello que es limitado: vale decir, nuestro tiempo de vida. Saquen el mayor provecho de él.
¡A Dios le interesa más perseguir vuestro corazón, vuestro dinero no le interesa para nada!. Busca vuestro Carácter, no le interesa averiguar cuál es vuestra casta o vuestra religión. Puesto que han nacido en la raza humana y están dotados de este poderoso intelecto y esta innata chispa de Divinidad, traten de realizarlo y de llegar a entender vuestra propia naturaleza.
No deberíamos herir los sentimientos de nadie, no deberíamos ni criticar ni ridiculizar a nadie y, hasta donde nos sea posible, deberíamos ir en ayuda de otros. Deberíamos cultivar estos sentimientos de fraternidad entre nuestros congéneres. Sólo entonces este mundo nuestro se convertirá en un verdadero cielo. Esta visión y esta actitud amplias han desaparecido. La estrechez de miras se ha ido entronizando subrepticiamente cada vez más. Cada vez más se trata de lo "mío" y lo "tuyo" y del "yo", y todo el tiempo sólo se preocupan de sí mismos. El sentido de la vida es el siguiente: Viajar Desde El Estado Del "Yo" Al Estado De "Nosotros".(5)
(1) Divinas Palabras (Vol. 1) - Bhagavan Sri Sathya Sai Baba - Pag. 31 -
(2) Conversando con la Divinidad - Bhagavan Sri Sathya Sai Baba - Pag. 10 -
(3) Divinas Palabras (Vol. 1) - Bhagavan Sri Sathya Sai Baba - Pag. 32/33 -
(4) Conversando con la Divinidad - Bhagavan Sri Sathya Sai Baba - Pag. 12 -
(5) Divinas Palabras (Vol. 1) - Bhagavan Sri Sathya Sai Baba - Pag. 33/36 -