El ser humano puede aprender cualquier cantidad de buenas cualidades de los animales, aves, insectos y gusanos. El burro es despreciado. Pero la cualidad de la paciencia que se halla en un burro no se halla ni siquiera en un humano. Sin importar las cargas que se apilen sobre su lomo, las soporta con paciencia. Aún careciendo de alimento y agua, presenta un semblante calmo. Así, el hombre tiene que aprender del burro la cualidad del autodominio. La hormiga es uno de los insectos más pequeños. Pero la hormiga tiene la capacidad de la previsión; con su conocimiento precoz de la estación lluviosa que se avecina, comienza a acopiar alimento con tres meses de anticipación. Luego tenemos a la araña - la determinación es uno de sus rasgos. Tantas veces como sea destruida o rota su red, la araña procede a rehacerla con implacable determinación.
- Divine Discourse, Feb 13, 1997. |