BUEN SERVICIO CHARLY, MUCHAS FELICIDADES
QUE SWAMI TE SIGA BENDICIENDO
QUE SWAMI TE SIGA BENDICIENDO
Haití, un país devastado, una oportunidad para servir
Se dice que allí donde la necesidad resulta más evidente, se encuentra el llamado de Dios, ya que sirviendo al hombre nos encontramos sirviendo al mismísimo Creador.
El 12 de enero a las 16.53, un terremoto asoló Haití y terminó con la vida de más de 200.000 haitianos y con ciudades enteras. Las duras imágenes comenzaron a recorrer el planeta y el dolor se compartió en todos los hogares del mundo.
En estas instancias hay dos formas bien marcadas de reaccionar: Una es pasiva y se limita generalmente a acompañar desde la palabra o el pensamiento. La otra forma de reaccionar es poner práctica una sagrada enseñanza de Sai Baba: Servicio es amor en acción.
Así actuó la Organización Sri Sathya Sai, que rápidamente se puso en movimiento para ser un instrumento que lleve el amor de Dios a través del servicio al prójimo en necesidad, y se generaron diferentes acciones de ayuda a Haití tomando como base la Organización Sri Sathya Sai de República Dominicana.
Desde allí se organizó la acción de los voluntarios y del grupo de Sai Medicare, integrado por profesionales de la salud de diversos países de la región y casi la totalidad de Latinoamérica colaboró enviando donaciones de alimentos, ropa, medicinas y agua.
CRONOLOGÍA DE LAS ACCIONES IMPLEMENTADAS:
Primeros pasos
El Comité Coordinador de República Dominicana se reunió inmediatamente después del terremoto y resolvió un plan de apoyo para los haitianos siniestrados, que incluyó recolección de alimentos, agua y medicinas con el objetivo de establecer un puesto de operación en la zona devastada.
Primer viaje: domingo 17 de enero
Una comisión realiza una visita a Puerto Príncipe para conocer la situación de los hermanos haitianos después del siniestro y evaluar qué podía hacer la Organización por ellos. Al mismo tiempo llevan una modesta provisión de alimentos, agua y medicinas producto del plan de apoyo de la reunión del Comité. Se constató también que la mayoría de los devotos de Sai Baba hatiianos habían resultado ilesos. Se hace contacto con Rony, Roger Vilfort y Ricot. |
Segundo viaje: martes 19 de enero
Un equipo de cuatro voluntarios llegó a Puerto Príncipe y entre otras acciones se visitó el Orfanato de Pastor ACF (Acción Contre Faim); se continuó la búsqueda de devotos para confirmar su estado de salud; se participó en operativos conjuntos haitianos y dominicanos en la preparación y reparto de alimentos y desayunos en las calles donde están los damnificados; se estableció contacto con la CAASD (Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo) para el abastecimiento de agua desde la casa de un devoto haitiano que posee cisternas y que ha sido la base de operaciones de la Organización desde el terremoto. En paralelo, un grupo de miembros de la Organización Sai de República Dominicana reciben donaciones de alimentos, agua y medicinas y las preparan para enviarlas a Haití. Otro grupo, en tanto, prepara cenas en las instalaciones del Centro Sai para repartir entre los pacientes del Hospital Darío Contreras, donde principalmente se atienden haitianos traídos al país por la condición delicada de salud. Durante los primeros seis días se repartieron 1110 raciones.
Tercer viaje: Jueves 21 de enero 2010
Parten hacia Haití, cuatro vehículos cargados de agua, alimentos y medicinas, utensilios de cocina y un tanque de gas. En el grupo viaja un miembro de la Organización Sai de Puerto Rico, quien llegó hasta Dominicana con un cargamento de alimentos, casas de campañas y medicinas.
Cuarto viaje: Martes 26 de enero 2010
Viaja un nuevo grupo de 7 personas llevando alimentos para distribuir y para el equipo de voluntarios instalado en Puerto Príncipe, así como también agua, medicinas, mantas, equipos médicos y vacunas. Este día se formalizó el apoyo económico y de médicos de la Organización Mundial. A partir del 29 de enero se genera un traslado constante entre República Dominicana y Haití
Cifras
En los primeros 20 días posteriores al terremoto se repartieron más de 3200 raciones de alimentos crudos junto con agua para cubrir las necesidades de 2 a 5 días por familia.
Pérdidas humanas
De los miembros de la Organización Sai de Haití, falleció Esperanz, quien dejó un hijo y esposa; mientras que el presidente del Centro Sai, Maurice Duval, resultó herido y trasladado a Miami para su recuperación.
EN HAITI:
La Casa Sai
La Casa Sai de Puerto Príncipe se convirtió en el centro de operaciones para los voluntarios; allí funciona también el Centro Sai de Haití, cuya sede fue destruida por el terremoto. La Casa y todas sus actividades son presididas por la Divina Presencia de la foto de Sai Baba que se pudo rescatar de entre los escombros. Se trata de una propiedad magnífica que no sufrió daños en el terremoto, ubicada en un barrio central de Puerto Príncipe. Cuenta con dos generadores y baterías que permitirán tener energía eléctrica propia, durante algunas horas al día. En la planta baja funciona el depósito de alimentos, y en otro sector, la base de recepción de insumos médicos. En la misma planta hay dos habitaciones y un baño que han sido asignados a voluntarias mujeres. La planta alta cuenta con dos habitaciones (usadas por los hombres), un amplio living-comedor, una cocina, un amplio salón que usa como Templo de oración, meditación, cantos, etc., un escritorio y dos baños. La capacidad máxima tolerable para las condiciones de higiene y convivencia correctas es de 10 hombres y 6 mujeres.
El agua
Para los voluntarios que habitan la casa, el consumo de agua potable es un punto crítico. La provisión de agua potable depende de la compra de botellones o botellas de agua, envasada, que es enviada desde República Dominicana. La provisión de agua para cocinar, higiene personal, higiene de baños y cocinas y lavado de prendas, depende del reparto de un camión cisterna que descarga el agua a la cisterna de la propiedad. En los momentos en los que hay electricidad, el agua puede ser servida por las cañerías del hogar, mientras que cuando la hay, hay que servirse con jarros, llenando baldes que son los que sirven los baños y la cocina. Para purificar agua no potable, los voluntarios utilizan elementos químicos. Esta agua purificada no es apta para consumo humano.
Vehículos
Se está utilizando una camioneta Toyota, doble cabina alquilada. El uso, la sobrecarga y el estado de las calles causaron un fuerte deterioro del vehículo. Algunos grupos de voluntarios alquilan Vans en Santo Domingo para su traslado y a su costo. La Organización Sri Sathya Sai y la Fundación Mundial Sri Sathya Sai se comprometieron a adquirir un nuevo vehículo para la Misión Sai en Haití.
Prioridades
Desde el inicio de la Misión Sai se mantiene una comunicación estrecha con los miembros de la Organización de Sai de Haití, miembros de las delegaciones, representantes del Comité Medico Internacional y autoridades de la Organización Sri Sathya Sai de Latinoamérica e Internacional para conocer las necesidades que plantean los líderes Sai haitianos para cubrir las necesidades de las personas afectadas por el terremoto. Una prioridad es proveer bolsas de alimentos no cocidos a poblaciones, acotados y con anotación previa para evitar los desbordes durante la distribución. Otra decisión fue implementar el servicio de alimentación (Narayana Seva) en lugares elegidos por los lideres Sai haitianos. Las raciones de alimentos cocidos superan las 1000 por salida. |
El tiempo de estadía como voluntarios
El tiempo promedio recomendado es de 10 días para proteger la integridad física y emocional de los voluntarios.
Servicio Médico
Se establecieron dos sistemas: Campamentos Permanentes y Campamentos de Un Día. Resolvimos llevar a cabo la asistencia médica en los lugares de culto religioso donde el trabajo era más controlado y tranquilo que en los campamentos gubernamentales y las medidas de seguridad se cumplieron. Los Campamentos Médicos Permanentes funcionan en las instalaciones de dos Iglesias Católicas (la capilla de los padres franciscanos Saint Alexandre y en los campamentos de refugiados situados en los locales de las monjas católicas de El Señor de la Santa Cruz) Estos campamentos cuentan con farmacia, consultorios, salas de curaciones y cirugía menor. Cuando hay profesionales voluntarios disponibles funciona un consultorio odontológico. De este servicio participan voluntarios médicos y asistentes, así como traductores de creole a español y de creole a inglés. Los servicios comienzan alrededor de las 9.30 de la mañana, y concluyen alrededor de las 17. Es imposible continuar más allá de este horario por la falta de luz, las condiciones de tránsito y el toque de queda.
Cifras del servicio médico
Cada médico atiende un mínimo de 50 consultas y un máximo de 100. Todos los días se ha promediado 80 consultas por médico. Un mínimo descanso permite comer algo o descansar unos minutos. El Consejo Central de Venezuela envió 130 kilos de suministros médicos: suero, jeringas, vendas, catéteres y equipo de esterilización.
Profesionales participantes (datos al 5 de febrero)
Haiti: 1 médico
República Dominicana: 3 médicos
Estados Unidos y Canadá, 6 médicos
México: 2 médicos y un odontólogo
El Salvador, 1 médico
Argentina: 3 médicos
República Dominicana: 3 médicos
Estados Unidos y Canadá, 6 médicos
México: 2 médicos y un odontólogo
El Salvador, 1 médico
Argentina: 3 médicos
Voluntarios participantes (datos al 5 de febrero)
Haití, Republica Dominicana y Puerto Rico son los países que tienen voluntarios colaborando en forma permanente. Lo hacen tanto en tierra haitiana como desde los Centros Sai y sus propios hogares preparando los envíos.
Estados Unidos y Canadá: 3 voluntarios
México: 4 voluntarios
Argentina: 1 voluntario
Estados Unidos y Canadá: 3 voluntarios
México: 4 voluntarios
Argentina: 1 voluntario
Ciudadanos haitianos atendidos
Entre el 28 de enero y el 5 de febrero inclusive, se ha brindado atención médica a 3500 haitianos aproximadamente, con un promedio diario de 380 pacientes.
Patologías prevalentes
Cefaleas, Fiebre, Deshidratación y la Debilidad, o sensación de Fatiga o Cansancio, fueron evidentes con alta frecuencia, a veces asociados a cuadros clínicos infecciones, diarreas, o anemias, etc.
Daño emocional e Impacto psíquico
Miedo, Angustia, Depresión, ataques de pánico, insomnio y claustrofobia son condiciones presentes en forma masiva en Desastres y Catástrofes, y el Terremoto de Haití, no fue una excepción. El impacto emocional en toda la población es altísimo.
Curaciones y cirugía menor
Se realizaron múltiples curaciones a pacientes con lesiones traumáticas, a heridas infectadas, por traumatismo o bien heridas quirúrgicas que necesitan limpieza diaria o periódica.
Cirugía de alta especialización
Algunos de los médicos voluntarios realizaron cirugías en centros hospitalarios, ayudando a otros cirujanos o bien como cirujanos principales, en casos de cirugía plástica reparadora, injertos etc.
Odontología
El servicio odontológico fue de gran utilidad, se realizaron curaciones, y extracciones, con alta eficiencia.
De la teoría a la práctica
En el más motivador silencio, se atienden a hermanos haitianos con enfermedades graves, tomando riesgos de contagio; sufriendo en el mismo cuerpo el dolor o la impotencia ante lo incurable o lo irreparable aunque manteniendo alto su espíritu, brindando amor, amor y amor. Todos amando a Todos, Sirviendo a Todos y en el más perfecto silencio. En el más Divino Anonimato.
El milagro de la partida:
Un verdadero milagro se produjo con la partida de Puerto Príncipe de un grupo de voluntarios. Los voluntarios de Latinoamérica junto a miembros de las OSSS de Estados Unidos y Canadá abandonaron la capital haitiana a través de UNHAS (United Nations Humanitarian Air Services). Realmente fue un milagro de Sai: la persona encargada dijo que no había ninguna posibilidad de volar en los próximos seis días y cinco minutos más tarde, sin ninguna razón especial, los seis voluntarios tuvieron la autorización de volar.
Conclusiones:
En esta terrible tragedia, el Milagro de la UNIDAD, PUREZA, DIVINIDAD, se hizo realidad. Nadie mira el color de la piel, el credo o religión ni el cargo, o el idioma, todos, sonríen, lloran y sirven, sin parar, sin cansancio, sin divisiones, y sin protagonismos, todo, en silencio, orando y entregando a Él, los resultados de la acción.
Carlos Suarez
TEXTO TOMADO DE: http://www.h2hlatino.org/articulos.php?id=278