Los grandes sabios del pasado, llenos de inmensa simpatía por sus congéneres, establecieron normas, reglas, límites y directivas para la vida y la conducta diarias, como para que nuestra mano y cerebro, instintos e impulsos no se vuelvan en contra de sí mismos, sino que se vuelvan hacia los ideales de la Verdad, Rectitud, Paz y Amor. Declararon que cada acción debe ser pesada en la báscula y aprobada sólo si limpia las emociones y pasiones; habrá de ser desechada si las espesa o descompone. Bhaavashuddhi (purificación de la disposición mental) debiera ser el fruto de cada acción. La adoración de ídolos, rituales, votos y ayunos, festivales y días santos – todo ello ha sido diseñado para domar la irracionalidad y entrenarle a uno para tomar por la senda recta hacia la autorrealización. | | | |
|
- Divine Discourse, Oct 17, 1966. |