El principal obstáculo para la liberación
Para que la verdad se haga evidente, solo hace falta reconocer lo falso como tal. "Yo soy el cuerpo" es una idea de la conciencia pura que, reflejada en la materia, asume una identidad espacio temporal. Esta idea falsa es el origen de la dualidad, y en esta nota veremos cómo deshacernos de ella. El problema no es el cuerpo, el problema es creer que el cuerpo es un "yo"; una entidad autónoma. Pero si ahora pienso en mí como persona, ¿puedo encontrarla? Ciertamente encuentro un cuerpo que respira, siente, piensa y cumple todas las funciones metabólicas, pero todo esto lo hace con o sin el "yo" superpuesto, y no gracias a él. Esta entidad falsa se siente dentro de la piel, pero si la buscamos es imposible de localizar… porque no existe.
Solo aparenta existir gracias al diálogo interno que florece por, y gira alrededor de, ese falso concepto originario, el "yo". Esta idea dice: "yo respiro, yo camino, yo pienso, yo hago, yo deseo, yo soy así…" cuando en realidad lo que ocurre es respirar, caminar, pensar, sentir, hacer… sin un yo a cargo. ¿Acaso una idea puede hacer que un cuerpo funcione? ¿Soy yo el que decide respirar, o la respiración sucede? Si "yo" fuera el pensador, debería poder decidir cuándo hacerlo, cuando no, elegir qué pensamientos tener, o saber cuál será el próximo pensamiento. Los ojos ven, y sin embargo no dicen "yo veo". ¿Qué es esta cosa llamada yo que no tiene ningún poder, y sin embargo se da tantos atributos? Así de ridículo es el yo cuando se comprende su falsedad. No por nada la primera reacción de muchos liberados, es la risa. Los que prefieran pensar que son un alma suelta, autónoma que entra en un cuerpo-casa al nacer, consideren lo siguiente: ¿Es el espacio el que entra en una casa, o es la casa la que entra en el espacio? ¿Hay alguna diferencia entre el espacio dentro o fuera de la casa?
La persona no tiene esperanza alguna de liberarse
"Lo eres, ya lo eres. Sabiendo lo que no eres, te liberas de ello y permaneces en tu estado natural". Estas palabras pertenecen a Sri Nisargadatta Maharaj (17 de abril de 1897 - 8 de septiembre de 1981), que junto con Ramana Maharshi fue uno de los sabios más reconocidos del siglo veinte, principalmente gracias al libro "Yo soy Eso", obra que contiene sus diálogos con distintos discípulos. Antes de su apodo post-íluminación, Maharaj se llamaba Maruti, un hombre casi sin educación que tenía un pequeño emprendimiento de venta de bidis –cigarrillos finitos- en Bombay. En 1924 se casó y tuvo tres hijas y un hijo. A los 35 años, un amigo le presentó a Sri Siddharameshwar Maharaj. Maruti quedó conmovido por su enseñanza y personalidad. Su corto vínculo con él propició su iluminación a los tres años de conocerlo. Si bien el satguru murió al poco tiempo, Nisargadatta recordó la simple instrucción de mantenerse en la sensación "yo soy".
El énfasis de Maharaj reside en no permitirnos quedar enredados en las ramas y olvidar la raíz. Por esta razón nos regresa a la fuente una y otra vez: "¿Qué eras antes de 'nacer'?".
Su método aparece en detalle más abajo. El lector quizás sienta que se podrían evitar las repeticiones de muchas de las palabras de Maharaj. Pero para él, estas repeticiones eran como martillazos al tremendo condicionamiento que tenemos; condicionamiento que hace que nos identifiquemos como una entidad separada y hacedora, dando origen a la dualidad. Lo opuesto al yo es el no-yo; es decir, todo lo que está fuera de nuestra piel. En las propias palabras de Maharaj: "Se pierden lo esencial, que es la eliminación de la persona". Por eso, la persona no puede liberarse de la irrealidad. Lo que se libera es la realidad, de la persona. Maharaj simplemente confió en su Gurú y siguió su método con determinación.
El método
1. Entender el "yo soy", tu sentido de ser, o simplemente de presencia o existencia, es extremadamente importante porque en él descansa el resultado de la enseñanza.
2. Tú tienes que ser antes de que lo demás pueda ser, tu sentido de presencia básica, el sentir "yo soy", es fundamental para poder seguir adelante.
3. Este "yo soy" es una sensación sin palabras, no verbal, independiente de los atributos "yo soy esto o aquello" (el cuerpo, las emociones, los pensamientos, etc.).
4. La sensación "yo soy", ¿no es acaso la primera que aparece cuando abres los ojos a la mañana?
5. Este "yo soy" sigue ahí contigo, siempre presente, siempre disponible, era y sigue siendo tu primer pensamiento. Es independiente de los atributos de la memoria, no tiene género, ni pasado ni futuro, siempre está ahí.
6. Rechaza todos los otros pensamientos e identificaciones y vuelve a la sensación primaria de ser, quédate ahí. La mente tiende a ir hacia afuera, regrésala al reconocimiento "yo soy".
7. No repitas "yo soy" como si fuera un mantra, instálate en la sensación silenciosa de existir.
8. Sólo el "yo soy" es certero, impersonal: todo conocimiento proviene de él. Es la raíz, aférrate a eso y deja ir a todo lo demás.
9. Este "yo soy" o testigo impersonal es el mismo en todos los cuerpos, el único sol-conciencia reflejado en las múltiples gotas.
10. Sin embargo, es limitado: de algún modo se percibe como si estuviera dentro del cuerpo.
11. Si puedes percibir el "yo soy", es evidente que lo que eres está más allá de él.
12. El "yo soy" es el moolmaya o ilusión primordial.
13. El "yo soy" es la suma total de todo lo que percibes, está sujeto al tiempo, es en sí una ilusión. No eres el "yo soy". Por el contrario, eres su condición de existencia.
14. Sin embargo, para que este "yo soy" se disuelva como identidad, debes prestarle toda tu atención.
15. Sólo siéntate en silencio y reconoce que "tú eres"; el "yo soy" sin palabras. No hagas nada más, y pronto llegarás a tu estado natural.
16. Tú eres previo a la aparición del "yo soy". ¿Dónde estaba esa sensación en el dormir profundo, sin sueños?
17. ¿Qué es lo que en ti comprende esta sensación de "yo soy" sin nombre, título o palabra?
18. Quédate en el "yo soy" sin ligarlo al cuerpo-mente. El "yo soy" es la primera ignorancia, persiste en ella y te descubrirás más allá de ella.
19. La inmortalidad es estar libre de esta sensación "yo soy". Para ser libre de ella, permanece en esta sensación todo el tiempo que puedas.
20. La identidad con el cuerpo no puede comprender la verdad, el conocimiento "yo soy", sí.
21. No eres nada de lo que aparece en la conciencia "yo soy", pero tampoco eres la conciencia.
22. Esta conciencia primordial, el "yo soy", es el puente entre la dualidad y lo absoluto. Permanece en ella todo lo que puedas, y rechaza todo lo demás.
23. El corazón de esta conciencia es la cualidad "yo soy". No hay personalidad ni individuo allí. Reside en el "yo soy" y trasciéndelo.
24. Comprende que el conocimiento "yo soy" ha descendido en ti, y que todas son sus manifestaciones. Con este entendimiento, te darás cuenta que no eres el "yo soy".
25. La enseñanza es simple: cuando el "yo soy" aparece, todo aparece con él. Cuando el "yo soy" decae, todo el resto desaparece. En tu estado absoluto, que es sin nombre y forma, aparece este conocimiento "yo soy", que tampoco tiene nombre o forma.
26. Permanece en el "yo soy" sin palabras, debes ser eso y no desviarte. Luego desaparecerá.
27. No eres el cuerpo ni el conocimiento "yo soy". Tú como lo absoluto no eres ninguna de las dos cosas, ni las necesitas.
28. Entendiendo la irrealidad del concepto "yo soy", te liberas de él.
29. Siéntate en silencio, siendo uno con la sensación "yo soy", y perderás toda preocupación por el mundo; este ya no tendrá capacidad de controlarte. Luego el "yo soy" también se irá, y lo que queda es lo Absoluto.
30. Focalízate en el "yo soy" hasta volverte testigo de él. Entonces te distinguirás del "yo soy", y alcanzarás tu estado natural.
31. Acepta plenamente el conocimiento "yo soy" como si fueras tú, y con total comprensión y fe, cree en el dictamen "yo soy eso por lo cual sé que yo soy".
32. Este conocimiento "yo soy" apareció en tu estado absoluto, por lo tanto es una ilusión. La sensación "yo soy" es en sí una ilusión; cualquier cosa que es vista a través de esta ilusión, no puede ser real.
33. No es con la identificación cuerpo-mente que debes sentarte a meditar. Es el concepto "yo soy" que medita en sí mismo.
34. Olvida todas las disciplinas físicas e identifícate solo con la sensación "yo soy", donde no hay palabras ni pensamientos.
35. Para aquél que comprenda el concepto "yo soy", que a la vez significa trascenderlo (si aparece en mí, soy independiente de él), no hay nacimiento, ni muerte, ni karma.
36. El atestiguamiento es previo al "yo soy", es su condición de ser. Justo aquí, justo ahora, eres lo absoluto.
37. Aférrate al "yo soy" muy firmemente, permanece en él y se disolverá. Luego serás tal como eres.
38. Trasciende el "yo soy" para entrar en el estado natural, sin conceptos, donde ni siquiera sabes que eres.
39. Quédate solo con el "yo soy" y todos los obstáculos desaparecerán, luego estarás más allá del ámbito cuerpo-mente.
40. Mi gurú me enseñó lo que soy, confié en él y cavilé sólo en eso. Mi estado original es el estado donde no hay un yo.
2. Tú tienes que ser antes de que lo demás pueda ser, tu sentido de presencia básica, el sentir "yo soy", es fundamental para poder seguir adelante.
3. Este "yo soy" es una sensación sin palabras, no verbal, independiente de los atributos "yo soy esto o aquello" (el cuerpo, las emociones, los pensamientos, etc.).
4. La sensación "yo soy", ¿no es acaso la primera que aparece cuando abres los ojos a la mañana?
5. Este "yo soy" sigue ahí contigo, siempre presente, siempre disponible, era y sigue siendo tu primer pensamiento. Es independiente de los atributos de la memoria, no tiene género, ni pasado ni futuro, siempre está ahí.
6. Rechaza todos los otros pensamientos e identificaciones y vuelve a la sensación primaria de ser, quédate ahí. La mente tiende a ir hacia afuera, regrésala al reconocimiento "yo soy".
7. No repitas "yo soy" como si fuera un mantra, instálate en la sensación silenciosa de existir.
8. Sólo el "yo soy" es certero, impersonal: todo conocimiento proviene de él. Es la raíz, aférrate a eso y deja ir a todo lo demás.
9. Este "yo soy" o testigo impersonal es el mismo en todos los cuerpos, el único sol-conciencia reflejado en las múltiples gotas.
10. Sin embargo, es limitado: de algún modo se percibe como si estuviera dentro del cuerpo.
11. Si puedes percibir el "yo soy", es evidente que lo que eres está más allá de él.
12. El "yo soy" es el moolmaya o ilusión primordial.
13. El "yo soy" es la suma total de todo lo que percibes, está sujeto al tiempo, es en sí una ilusión. No eres el "yo soy". Por el contrario, eres su condición de existencia.
14. Sin embargo, para que este "yo soy" se disuelva como identidad, debes prestarle toda tu atención.
15. Sólo siéntate en silencio y reconoce que "tú eres"; el "yo soy" sin palabras. No hagas nada más, y pronto llegarás a tu estado natural.
16. Tú eres previo a la aparición del "yo soy". ¿Dónde estaba esa sensación en el dormir profundo, sin sueños?
17. ¿Qué es lo que en ti comprende esta sensación de "yo soy" sin nombre, título o palabra?
18. Quédate en el "yo soy" sin ligarlo al cuerpo-mente. El "yo soy" es la primera ignorancia, persiste en ella y te descubrirás más allá de ella.
19. La inmortalidad es estar libre de esta sensación "yo soy". Para ser libre de ella, permanece en esta sensación todo el tiempo que puedas.
20. La identidad con el cuerpo no puede comprender la verdad, el conocimiento "yo soy", sí.
21. No eres nada de lo que aparece en la conciencia "yo soy", pero tampoco eres la conciencia.
22. Esta conciencia primordial, el "yo soy", es el puente entre la dualidad y lo absoluto. Permanece en ella todo lo que puedas, y rechaza todo lo demás.
23. El corazón de esta conciencia es la cualidad "yo soy". No hay personalidad ni individuo allí. Reside en el "yo soy" y trasciéndelo.
24. Comprende que el conocimiento "yo soy" ha descendido en ti, y que todas son sus manifestaciones. Con este entendimiento, te darás cuenta que no eres el "yo soy".
25. La enseñanza es simple: cuando el "yo soy" aparece, todo aparece con él. Cuando el "yo soy" decae, todo el resto desaparece. En tu estado absoluto, que es sin nombre y forma, aparece este conocimiento "yo soy", que tampoco tiene nombre o forma.
26. Permanece en el "yo soy" sin palabras, debes ser eso y no desviarte. Luego desaparecerá.
27. No eres el cuerpo ni el conocimiento "yo soy". Tú como lo absoluto no eres ninguna de las dos cosas, ni las necesitas.
28. Entendiendo la irrealidad del concepto "yo soy", te liberas de él.
29. Siéntate en silencio, siendo uno con la sensación "yo soy", y perderás toda preocupación por el mundo; este ya no tendrá capacidad de controlarte. Luego el "yo soy" también se irá, y lo que queda es lo Absoluto.
30. Focalízate en el "yo soy" hasta volverte testigo de él. Entonces te distinguirás del "yo soy", y alcanzarás tu estado natural.
31. Acepta plenamente el conocimiento "yo soy" como si fueras tú, y con total comprensión y fe, cree en el dictamen "yo soy eso por lo cual sé que yo soy".
32. Este conocimiento "yo soy" apareció en tu estado absoluto, por lo tanto es una ilusión. La sensación "yo soy" es en sí una ilusión; cualquier cosa que es vista a través de esta ilusión, no puede ser real.
33. No es con la identificación cuerpo-mente que debes sentarte a meditar. Es el concepto "yo soy" que medita en sí mismo.
34. Olvida todas las disciplinas físicas e identifícate solo con la sensación "yo soy", donde no hay palabras ni pensamientos.
35. Para aquél que comprenda el concepto "yo soy", que a la vez significa trascenderlo (si aparece en mí, soy independiente de él), no hay nacimiento, ni muerte, ni karma.
36. El atestiguamiento es previo al "yo soy", es su condición de ser. Justo aquí, justo ahora, eres lo absoluto.
37. Aférrate al "yo soy" muy firmemente, permanece en él y se disolverá. Luego serás tal como eres.
38. Trasciende el "yo soy" para entrar en el estado natural, sin conceptos, donde ni siquiera sabes que eres.
39. Quédate solo con el "yo soy" y todos los obstáculos desaparecerán, luego estarás más allá del ámbito cuerpo-mente.
40. Mi gurú me enseñó lo que soy, confié en él y cavilé sólo en eso. Mi estado original es el estado donde no hay un yo.
L.G.M
TEXTO TOMADO DE: http://www.h2hlatino.org/articulos.php?id=279