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Hay tres tipos de devoción: el método Vihanga, en el cual, como un pájaro que se lanzara sobre la fruta madura de un árbol, el devoto es demasiado impaciente, y por la impaciencia misma que exhibe, pierde la fruta, que se le cae. El método Markata se parece a un mono que aferra una fruta y después elige otra y tira de la misma, dando lugar a la inestabilidad, ya que es incapaz de decidir cuál es la fruta que quiere. Así también, el devoto de este tipo vacila y cambia de meta con demasiada frecuencia, perdiendo así toda posibilidad de éxito. El tercer tipo, el ideal, es el método Pipeelika, en el cual como la hormiga, que avanza lenta pero constantemente hacia la dulzura, el devoto se mueve hacia el Señor directamente y con atención indivisa, obteniendo así Su Gracia.
- Sathya Sai Speaks, Vol I, MahaShivarathri, 1955.
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