Con frecuencia oímos hablar acerca del concepto de igualdad (Samaanathwa): de que cada ser es igual al resto. Esta noción es a menudo mal entendida. Por ejemplo, en un hospital todos tienen derecho a los medicamentos; pero lo que se le da a uno no se le debe dar a otro. No puede haber igualdad en la administración de los medicamentos. A cada quien le corresponde el medicamento que cure su enfermedad. Esta lucha en nombre de la igualdad, es sólo una de las maneras en que el ser humano trata de lograr la felicidad. En casi todo el mundo, la gente busca hoy tales atajos y caminos erróneos para lograr la felicidad. Por supuesto, todos tienen el mismo derecho al amor y la simpatía, y a la gracia de Dios. Pero permítanme decirles que si no reformamos nuestra propia conducta y los pequeños actos cotidianos, la felicidad estará fuera de nuestro alcance. Pravartana, es decir el comportamiento, es de suma importancia.
- Divine Discourse, Nov 23, 1964. |