La más alta disciplina espiritual reside en el seguir asiduamente las instrucciones del Maestro. Años y años de riguroso entrenamiento hacen a un soldado que pueda soportar todos los rigores de la guerra. El heroico luchador no se formó en un día. Restricciones, reglas, ejercicios y técnicas establecidas para él, fueron practicadas por largo tiempo. Asimismo el aspirante espiritual practicante, que puede ganar victorias en la vida, ¡no se puede hacer en un solo día! Entiendan esto y aprovechen su oportunidad en esta vida, hagan pleno uso de ella. Necesitarán venir y fundirse en lo Divino, si no en este nacimiento, por lo menos en diez nacimientos más. Por ende, no desperdicien la oportunidad y empéñense muy seriamente, a partir de hoy, en alcanzar la Gracia del Señor. El Compasivo Señor ciertamente les concederá la Gracia como recompensa por sus prácticas espirituales.
- Divine Discourse, Feb 12, 1964. |