Todos deben efectuar su salida algún día - ese momento no debe ser de angustia; uno debe partir con una sonrisa y una reverencia. Para lograr eso se necesita mucha preparación. Dejar todo lo que se ha logrado y acumulado durante una larga vida es una tarea muy dura. Por eso, prepárense para ella desde ahora, descartando el apego a una cosa tras otra. En sus sueños ustedes ven muchas cosas, e incluso puede que adquieran poder y posición. Cuando despiertan, no lloran por haberles perdido, aunque durante el sueño eran muy reales y les daban auténtica alegría y satisfacción. ¡Ustedes se dicen: "Era sólo un sueño", y siguen adelante con la vida! ¿Qué les impide tratar con la misma despreocupación a todas las posesiones que reunieron durante el estado de vigilia? Cultiven esa actitud, y partan con una sonrisa cuando se baje el telón.
- Divine Discourse, Aug 1, 1956. |