El que está lleno de amor tiene una gran tranquilidad de espíritu, es puro de corazón y es imperturbable ante cualquier circunstancia, fracaso o pérdida. Esta fortaleza se deriva del amor del Señor, y dota a la persona de confianza en sí misma. La auto confianza genera un inmenso poder interno. Todos tienen que desarrollar este poder para experimentar la bienaventuranza del Ser (Atma-Ananda). El amor debe estar libre de sentimientos de expectativa de devolución o recompensa. El amor que surge de un deseo de obtener algo a cambio no es verdadero amor. Debe desarrollarse el amor absolutamente desinteresado y sin motivo. Este es el deber imprescindible de todos. No deben orar a Dios buscando este favor o este otro, pues su visión es limitada. Ninguno de ustedes puede imaginar qué tesoros inmensamente preciosos, Divinos y magníficos pueden hallarse cuando obtienen la casa del tesoro de la Gracia Divina. | - Divine Discourse, Oct 9, 1989. |